Un interruptor de pared defectuoso podría provocar un incendio que involucre materiales inflamables.
El interruptor de pared puede presentar mal contacto o desgaste de los contactos internos durante el uso prolongado. Estas fallas pueden provocar conexiones de alta impedancia, generando un calor excesivo en los contactos, elevando la temperatura lo suficiente como para encender materiales inflamables cercanos. Factores ambientales como la humedad y la acumulación de polvo también pueden exacerbar los cambios de resistencia en las piezas conductoras, provocando la formación de un arco eléctrico dentro del interruptor. Este proceso de arco eléctrico genera altas temperaturas instantáneas, lo que podría encender materiales inflamables cerca de las paredes, como adornos de madera o papel.
