¿Cómo diagnosticar el problema con un interruptor de pared?

En ocasiones, la inestabilidad del sistema de iluminación del hogar puede deberse al envejecimiento del interruptor de pared o a un mal contacto interno. Si el interruptor emite crujidos, zumbidos o chispas al encenderlo, estas señales pueden indicar contactos internos sueltos u oxidación de componentes metálicos.

Si el panel del interruptor se siente notablemente caliente, incluso ligeramente quemado, generalmente significa que el circuito está sobrecargado o que hay una impedancia anormal en la conexión, por lo que no debe seguir utilizándose.

Si las piezas mecánicas del interruptor funcionan con lentitud (por ejemplo, si el botón o la palanca están atascados, el interruptor es inestable o hay un retraso en la respuesta de la luz después de encenderlo/apagarlo), esto indica que el mecanismo interno puede estar desgastado o que el resorte puede estar averiado.